Si superamos todos nuestros defectos y debilidades, Satanás no tendrá forma de vencernos.

Satanás ataca tocando nuestros defectos y debilidades. Él busca que caigamos en la corrupción, que no seamos salvos, y que vivamos con dolor, como en un infierno, tanto en este mundo como en el próximo. Para lograrlo, lanza todo tipo de ataques y tentaciones. Pero si no tenemos ningún defecto o debilidad, por mucho que Satanás nos ataque o tiente, no caemos. Al contrario, podemos resistirlo por completo, vencerlo y destruir su obra. Dios desea que venzamos a Satanás, que seamos salvos y vivamos una vida llena de bendiciones. Por eso, nos ha enseñado claramente qué defectos y debilidades usa Satanás para atacarnos, y cómo podemos superarlos. Ahora, en estos tiempos finales, Satanás está actuando con violencia, arrastrando a la humanidad hacia la desgracia. Pero incluso en medio de todo esto, si seguimos lo que Dios nos dice y superamos cada defecto y debilidad, no caeremos aunque Satanás nos ataque. Al contrario, podremos vencerlo, recibir la salvación y las bendiciones, y vivir con ver...