Ora sin descanso para que la justicia prevalezca
Si el mal gobierna este mundo, se convertirá en un infierno; pero si la justicia prevalece, se transformará en un Cielo.
Por lo tanto, oremos para que la justicia reine en nuestro mundo.
Cada vez más personas se están dando cuenta de que este mundo está bajo la influencia del mal.
Sin embargo, ese mal tan grande está ahora en un rápido declive y parece estar al borde de su colapso total.
No cabe duda de que este cambio es el resultado de nuestras fervientes oraciones pidiendo la erradicación de todo lo malo que nos rodea. Mientras sigamos orando con devoción, el mal continuará disminuyendo y, finalmente, será destruido.
No obstante, incluso si logramos eliminar el mal de este mundo, es crucial que la rectitud tome el control y prevalezca. De lo contrario, las raíces del mal volverán a afianzarse y crecerán, recuperando su poder.
Por lo tanto, no solo debemos orar por la destrucción del mal, sino también hacerlo con fervor para que la justicia reine y prevalezca en nuestro mundo.
Solo así, el tan anhelado Cielo Terrestre que Dios desea se hará realidad en toda su grandeza, permitiendo que los justos vivamos en paz y felicidad en este mundo.
IR AL ARTÍCULO ORIGINAL: RAPT blog 917 (31/03/2025)
