¿Te sientes vacío? Tal vez lo que te falta es el amor de Dios.
Solo al establecer una relación de amor con Dios los seres humanos podemos vivir una vida plena y satisfactoria.
Si no logramos esto, por más que busquemos llenar nuestro vacío, nuestro corazón nunca estará verdaderamente satisfecho, y estaremos destinados a vagar por siempre en busca del amor.
El Señor nos dijo que aquellos que no fueron amados por nadie en este mundo, probablemente seguirán viviendo sin ese amor incluso después de la muerte.
Nuestro cuerpo humano y nuestro ser espiritual comparten un mismo cerebro, por lo que, al morir, nuestro espíritu lleva consigo nuestra personalidad y las huellas de nuestra vida.
Si una persona nunca fue amada, es porque quizás no poseía la capacidad para ser amada. Y, aún después de la muerte, esa carencia permanecerá, ya que no tendrá lo necesario para recibir el amor de los demás.
Por otro lado, incluso si en este mundo llegamos a ser amados por alguien, al llegar al mundo espiritual, donde nos encontramos con personas desconocidas, no podemos dar por sentado que experimentaremos ese amor.
Si alguien no recibe amor de nadie, su corazón quedará vacío, y vivirá en constante búsqueda del amor que lo sacie.
Pero aquellos que conocen a Dios y establecen una verdadera relación de amor con Él, no solo experimentarán Su amor en este mundo, sino también en el próximo. Serán liberados de la necesidad insaciable en su corazón y vivirán una vida plena y eterna.
El amor humano es frágil y puede desaparecer en cualquier momento, pero el amor de Dios es eterno y seguro, siempre que vivamos enamorados de Él.
IR AL ARTÍCULO ORIGINAL: RAPT blog 890 (14/12/2024)
