Sirviendo a Dios: Cómo las Recompensas Invisibles Te Impulsan a Seguir
Quienes trabajan con dedicación y amor por el Cielo recibirán abundantes recompensas celestiales, por lo que nunca querrán apartarse de Él.
Aquellos que no se entregan con todo su ser por amor a Dios, probablemente se alejarán pronto, pues no experimentarán las bendiciones celestiales que sostienen su corazón.
Los que sirven a Dios de corazón pueden recibir recompensas divinas verdaderamente grandes.
Aunque su esfuerzo tal vez no sea reconocido por los demás, Dios ve todo lo que hacen y recompensa con generosidad.
Y la recompensa de Dios es tan grande que, incluso cuando enfrenten dificultades mientras cumplen con su misión, nunca pensarán en abandonar el camino, ni en alejarse de Él.
Es como en este mundo, donde las empresas premian generosamente a aquellos empleados que realmente contribuyen de manera significativa, y se aseguran de que no se vayan a otros lugares. Dios actúa de la misma forma.
De hecho, Él también toma medidas para evitar que alguien se aleje de Su presencia.
Así que, si alguien no quiere separarse de Dios, es una señal de que Él le ha otorgado una recompensa tan grande que esa persona se siente impulsada a seguir adelante, sabiendo que está cumpliendo con la labor que Dios le ha encomendado.
Por el contrario, aquellos que piensan en alejarse de Dios cada vez que enfrentan dificultades podrían estar señalando que aún no están realizando la obra realmente beneficiosa para Él.
Mi oración es que cada uno de ustedes pueda cumplir con el trabajo que es verdaderamente necesario para el Cielo y disfrutar de una vida llena de recompensas, tanto en lo terrenal como en lo espiritual.
IR AL ARTÍCULO ORIGINAL: RAPT blog 891 (21/12/2024)
