Las Claves para Ser Verdaderamente Amados por Dios: Vivir con Diligencia, Crecer y Renacer
Una persona que carece de diligencia nunca crecerá y, con el tiempo, Dios puede perder la paciencia con ella.
Solo aquellos que viven con un propósito y crecen cada día pueden esperar que Dios los busque con ansias, los guíe y nutra su desarrollo.
Las personas que viven con diligencia no solo adquieren habilidades y logran grandes cosas, sino que también experimentan una constante transformación en sus vidas.
Mientras tanto, aquellos que eligen la pereza, se quedan atrás, atrapados en la repetición y la falta de cambio.
Con el tiempo, esto puede hacer que pierdan la conexión con los demás y con Dios.
Es importante entender que, así como una persona perezosa deja de crecer, Dios también puede alejarse si no estamos dispuestos a avanzar.
Por eso, debemos vivir cada día con diligencia, cambiar, crecer y aprender.
Solo entonces podremos experimentar la verdadera cercanía de Dios y recibir Su intercesión y bendiciones de manera constante.
Imaginen cuánto podríamos prosperar si viviéramos de esta manera, recibiendo la gracia y el amor de Dios cada día.
Mi oración es que cada uno de ustedes continúe en este camino, creciendo y renaciendo, para ser verdaderamente amados por Dios y vivir una vida plena y llena de bendiciones.
IR AL ARTÍCULO ORIGINAL: RAPT blog 875 (14/10/2024)