El Amor Recíproco: Un Camino de Bendiciones Divinas
Cuando invocamos a Dios, se abre el camino por el cual Él nos ama, y cuando le agradamos, se abre el camino por el cual le podemos amar.
En Su Palabra, Dios nos dice con frecuencia: "Invoca a Dios" y "Aférrate a Dios".
También nos recuerda en repetidas ocasiones: "Agradar a Dios" y "Amar a Dios".
A simple vista, puede parecer que "invocar a Dios" y "agradar a Dios" son ideas opuestas.
Algunos podrían preguntarse por qué Dios nos dice que nos aferremos a Él en un momento, y en otro, que Le agrademos.
La razón es esta: solo cuando invocamos a Dios abrimos el camino por el cual Él puede amarnos. Y solo cuando lo agradamos, podemos abrir el camino por el cual podemos amarlo.
Cuando ambos caminos (invocar a Dios y agradarle) están bien establecidos, puede producirse un verdadero intercambio de amor. Tanto Dios como nosotros, los seres humanos, podemos amarnos mutuamente, llenándonos de amor y alegría.
En resumen, todo lo que Dios dice es por amor.
IR AL ARTÍCULO ORIGINAL: RAPT blog 875 (14/10/2024)