Vive Según la Palabra de Dios: La Ley Sencilla que Define tu Destino
No importa cuán variada pueda parecer la vida de una persona; en realidad solo existen dos tipos de vida: "Seguir a Dios y ser feliz" o "Desobedecer a Dios y volverse infeliz".
Hoy en día, Japón enfrenta una serie de desastres uno tras otro, y muchas personas viven situaciones de sufrimiento sin precedentes.
Esto ha sucedido porque no aceptaron las palabras de Dios, y aunque alguno las aceptaron, no las obedecieron.
Sin embargo, por mucho que se diga, muchos japoneses seguirán negándose a reconocer esta verdad.
Lo que no se puede evitar es que, al final, solo hay dos caminos en la vida: "Seguir a Dios y encontrar la felicidad" o "Desobedecer a Dios y caer en la infelicidad".
Para aquellos que eligen seguir a Dios, no importa cuántas desgracias puedan ocurrirles en el corto plazo, siempre encontrarán una mayor felicidad y prosperidad a lo largo de sus vidas.
En cambio, aunque los que desobedecen a Dios puedan experimentar cosas buenas temporalmente, tarde o temprano se enfrentarán a una desgracia mucho mayor que los superará, y su destino cambiará radicalmente .
Lo más triste es que muchas personas solo se dan cuenta de esta verdad cuando se encuentran al borde de la muerte.
En resumen, aquellos que han vivido en obediencia a Dios al final de sus vidas se sentirán agradecidos, sin arrepentimientos, sabiendo que vivieron una vida plena y feliz. Por el contrario, aquellos que han vivido alejados de Él, al final de sus días, estarán abrumados por el arrepentimiento y el remordimiento.
Mi oración es que todos ustedes, al leer estas Palabras, puedan comprender esta sencilla ley y vivir una vida plena y feliz, en obediencia a la Palabra de Dios.